Actualidad
Colombia al borde del colapso fiscal por decisión del Gobierno Petro
Colombia se encuentra al borde de un giro económico de alto impacto. En medio del déficit fiscal más alto de su historia, que ya supera los $120 billones para 2025, el Gobierno del presidente Gustavo Petro estaría considerando suspender la regla fiscal, una medida que podría alterar profundamente la estabilidad económica del país.
Este cambio, que se evaluará el próximo lunes en el Consejo Superior de Política Fiscal (Confis), implicaría activar la cláusula de escape contemplada en la Ley 1473 de 2011. La decisión se tomaría en un contexto de crisis de caja, reducción de ingresos, desaceleración económica y crecientes presiones sociales.
¿Qué es la regla fiscal y por qué es tan importante?
La regla fiscal es un compromiso legal del Gobierno colombiano para mantener bajo control el déficit público y garantizar la sostenibilidad de la deuda. Es, en esencia, una guía que impide que el gasto estatal se desborde más allá de lo que los ingresos permiten, con el fin de evitar desequilibrios macroeconómicos graves.
Suspender esta regla, aunque legalmente posible bajo circunstancias extraordinarias —como en pandemia—, representa un mensaje delicado para los mercados financieros internacionales y para las agencias calificadoras de riesgo.
La cláusula de escape: ¿justificación o excusa?
La Ley permite activar la cláusula de escape en casos excepcionales, como emergencias económicas o desastres naturales. Sin embargo, diversos expertos advierten que, en este caso, no existe una justificación técnica sólida que respalde la decisión.
Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, fue claro en su advertencia:
“Si la salida va a ser, en vez de una señal de austeridad y de compromiso fiscal, utilizar una cláusula de escape sin ninguna razón que la justifique, lo que va a pasar es que habrá consecuencias negativas desde el punto de vista de la deuda pública”.
Mejía agregó que, si se toma esta medida, Colombia podría enfrentar un aumento en el costo de su deuda y una pérdida significativa de credibilidad frente a los inversionistas.
Riesgos inmediatos al superar la regla fiscal: deuda, calificación y confianza
Suspender la regla fiscal puede liberar al Gobierno para aumentar el gasto público sin consecuencias legales inmediatas, pero a un precio muy alto:
- Pérdida de confianza de los mercados internacionales.
- Incremento del riesgo país.
- Mayor costo del financiamiento externo e interno.
- Posibles rebajas en la calificación crediticia, lo que afectaría a empresas y ciudadanos por igual.
De hecho, Moody’s podría retirar el grado de inversión a Colombia, como advirtió el exministro de Hacienda José Antonio Ocampo, quien considera esta decisión como “desafortunada e inconveniente”.
Te puede interesar: Corte Prohíbe Internet Gratis en WhatsApp y Facebook
Ministerio de Hacienda, ¿sin autonomía?
Otro aspecto preocupante es la aparente pérdida de autonomía del Ministerio de Hacienda frente a la Casa de Nariño. Según fuentes cercanas, la cartera económica ha venido cediendo terreno ante la influencia directa del presidente Petro.
El actual ministro de Hacienda, Germán Ávila, ha sido claro en su postura:
“Yo soy el ministro de Hacienda del Gobierno del presidente Petro (…) con el presidente mantenemos una continua y permanente coordinación de las políticas”.
Sin embargo, esa lealtad ha sido interpretada por algunos como una renuncia a la función técnica e independiente que históricamente ha caracterizado a esta entidad. En contraste, sus antecesores, como José Antonio Ocampo y Diego Guevara, terminaron saliendo del cargo tras enfrentamientos con el Ejecutivo por la dirección fiscal del país.
La crisis en números y credibilidad
El Marco Fiscal de Mediano Plazo, que será publicado próximamente, debe reflejar la realidad de las finanzas públicas. Pero expertos como Germán Machado, analista económico, aseguran que la credibilidad del Ministerio está en uno de sus puntos más bajos.
“Como hace rato no le cuadran las cuentas, y ya agotaron el maquillaje contable, ahora solo tienen dos caminos: echarle otra capa de cosméticos al Marco Fiscal o sincerar de una vez por todas las cifras”, sostuvo.
Según Machado, en 2024 la regla fiscal apenas se cumplió gracias a maniobras contables. Pero en 2025, ya no hay espacio para esas estrategias:
“Lo cierto es que a estas alturas ya podemos decir que el Gobierno no va a cumplir la regla fiscal este año”, concluyó.
¿Y ahora qué?
Todo parece indicar que el Gobierno se debate entre dos caminos complejos:
- Respetar la regla fiscal, lo que implicaría recortes, austeridad y decisiones impopulares.
- Suspenderla usando la cláusula de escape, lo que da alivio inmediato, pero con serias repercusiones futuras.
Ambos caminos tienen costos, pero la diferencia radica en la señal que se envía a los mercados internacionales y a los ciudadanos. En medio de un año clave para la economía nacional, lo que está en juego no es solo el equilibrio fiscal, sino también la confianza en la institucionalidad económica del país.
¿Una jugada política o una necesidad técnica?
La discusión no es menor. En tiempos de incertidumbre, cada decisión cuenta. Activar la cláusula de escape para suspender la regla fiscal sin una justificación real puede convertirse en una bomba de tiempo para la economía colombiana.
Con el déficit disparado, el crecimiento estancado y la presión social al alza, el Gobierno enfrenta uno de los mayores desafíos fiscales de las últimas décadas. La pregunta clave es si tomará una ruta responsable o si pondrá en riesgo la estabilidad financiera del país por una necesidad de corto plazo.