Colombia
Reveladores audios exponen corrupción en la alcaldía de Daniel Quintero
Un reciente escándalo ha sacudido la administración de la alcaldía de Medellín, encabezada por Daniel Quintero, después de la filtración de audios comprometedores que revelan una preocupante trama de corrupción y mal manejo de los recursos públicos. Los audios, obtenidos durante una reunión en la secretaría de Inclusión Social el 6 de agosto de 2021, muestran cómo la administración no solo malgastó el presupuesto municipal, sino que también buscó activamente maneras de eludir la justicia y engañar a la ciudadanía.
La reunión, que tuvo lugar en la mañana de un viernes, fue presidida por Isabel Cristina Cadavid, entonces asesora jurídica de la secretaría de Inclusión Social, y Santiago Preciado, subsecretario técnico y hombre de confianza del secretario Juan Pablo Ramírez, quien se encontraba de licencia de paternidad. La agenda de la reunión era informar a los directores de programas que la secretaría de Hacienda había gestionado incorrectamente el presupuesto anual, dejando sin fondos a programas esenciales destinados a los más vulnerables, como los adultos mayores y los habitantes de calle.
Los audios revelan que la administración Quintero, que se había posicionado como una fuerza alternativa y defensora de los pobres, estaba dispuesta a cortar programas sociales cruciales y recurrir a estrategias creativas pero cuestionables para cubrir el déficit financiero. Pilar Rodríguez, líder del programa de Niñez, se convirtió en una testigo clave contra la administración al denunciar las exigencias de coimas para financiar el proyecto político de Quintero a través de la fundación El Futuro se Parece a Nosotros.
Isabel Cristina Cadavid admitió en la reunión que el municipio enfrentaba una situación económica muy compleja, con un presupuesto basado en ingresos variables que no se materializaron debido a la pandemia y la contingencia de Hidroituango. Esto llevó a la administración a considerar medidas desesperadas, como saltarse la licitación pública para el plan de alimentación escolar (PAE) y buscar formas rápidas y baratas de contratación.
Uno de los momentos más alarmantes de la reunión fue cuando Cadavid sugirió detener programas vitales para personas vulnerables y preparar argumentos legales para justificar contrataciones directas, a pesar del riesgo de incurrir en delitos como la celebración indebida de contratos. «El riesgo es muy alto», admitió, instando a los directivos a prepararse para auditorías y posibles investigaciones de la Contraloría, Procuraduría y Fiscalía.
Santiago Preciado, por su parte, enfatizó la necesidad de mantener una narrativa unificada ante los medios de comunicación y prohibió culpar a la secretaría de Hacienda por la crisis presupuestaria. La línea oficial sería que la administración había hecho inversiones históricas en el primer semestre del año para la recuperación post-pandemia, aunque esto fuera una mentira.
Este escándalo pone en evidencia la manipulación y deshonestidad de una administración que se presentaba como defensora de los desprotegidos. A pesar de la gravedad de las acusaciones y la clara evidencia en los audios, la Fiscalía no ha tomado ninguna decisión judicial hasta la fecha, dejando a muchos ciudadanos cuestionando la transparencia y justicia en la gestión pública.
La revelación de estos audios no solo sacude la confianza en la administración de Daniel Quintero, sino que también resalta la urgente necesidad de una mayor transparencia y rendición de cuentas en el manejo de los recursos públicos. Los habitantes de Medellín merecen respuestas y acciones concretas para corregir estos graves errores y garantizar que sus intereses estén verdaderamente protegidos por sus líderes electos.